Frutas de verano: más divertidas y con muchos beneficios para los niños.

La proximidad del verano no solo nos ha traído días más largos y con mejores temperaturas, también nos ha permitido disfrutar de nuevo de las deliciosas frutas propias de esta época.

Porque es cierto que el invierno se hace largo también desde el punto de vista alimenticio. En lo que se refiere a las frutas, las opciones son más limitadas y, por eso, la aparición de las primeras frutas de verano, llenas de color y sabor, son como un soplo de aire fresco gastronómico. Y también lo son para los niños que pueden disfrutar de piezas que les resultan más sabrosas y divertidas y que, además, contienen numerosos beneficios para su salud. Te contamos qué les aportan algunas de estas frutas típicamente veraniegas.

Frutas de verano: color y beneficios.

Se acerca el verano y con unas temperaturas en continuo ascenso, el cuerpo pide hidratarse a través de alimentos más frescos y ligeros. Y si además son sabrosos y divertidos, mucho mejor, como es el caso de las frutas de verano que solo con su color llenan de alegría los tentempiés, los postres y las meriendas de los niños. Además, contienen muchos beneficios como vamos a ver ahora con estos ejemplos:

1.- Fresas:

Son unas de las frutas más saludables para los niños, además de que su color y apariencia les atrae. Para ellos están más cerca de las chuches que cualquier otra fruta. Pero lo que desconocen es que es una fruta nutritiva con un alto contenido en vitamina C, minerales antioxidantes y baja en azúcar. Les ayuda a cuidar el sistema inmunitario y mejorar las digestiones, por eso son perfectas como postre.

2.- Sandía:

Otra fruta de verano cargada de color y alegría, pero también de grandes beneficios desde el punto de vista nutricional. Contiene magnesio, zinc y hierro, además de ser una fuente importantísima de folatos, especialmente importantes durante los periodos de infancia y adolescencia. Además hidrata y protege del sol por lo que es perfecta como merienda para llevar a la playa o a la piscina.

3.- Ciruela roja o amarilla:

Otras frutas de verano que, si están maduras, tienen un sabor delicioso y aportan mucha hidratación al organismo. Además, contienen vitaminas A, C, B1, B2, E… por lo que contribuyen a evitar la anemia y absorber el hierro. Son una gran fuente de fibra, además de que combinar sus dos variedades llama la atención a los niños, convirtiéndose en otro postre perfecto.

4.- Melón:

El melón es una de las frutas más refrescantes y deliciosas. Es rico en potasio, un mineral fundamental para el crecimiento de los músculos y el funcionamiento de los nervios, además de que ayuda a regular el ritmo cardíaco y posee muchos otros minerales como zinc, fósforo, magnesio y hierro. Córtalo en trocitos y que no falte el tupper de melón para tus hijos.

 

Disfrutemos de las frutas de verano y hagamos que los niños se acostumbren a incluirlas en su dieta por todo lo bueno que aportan, además de que son deliciosas y existe una gran variedad como para no tener que acudir siempre a las mismas. Sin duda, la alternativa perfecta a las meriendas industriales y ultraprocesadas que debemos evitar. En nuestras escuelas infantiles en Majadahonda incluimos el consumo de fruta en nuestros menús para que los niños interioricen desde pequeños la importancia de incluir estos alimentos en su vida diaria.