Porque es la comida más importante del día, así debe ser el desayuno de los niños de 2 y 3 años.

Tenemos tatuado en nuestra mente que “el desayuno es la comida más importante del día”. Y, efectivamente, lo es para todos los grupos de población, incluidos los pequeños de la casa. Pero, ¿cómo debe ser el desayuno de los niños de 2 y 3 años? ¿Qué deben tomar antes de poner rumbo a sus guarderías en Majadahonda? Te lo contamos en este nuevo post.

¿Cómo debe ser el desayuno de los niños de 2 y 3 años?

El desayuno es crucial para personas de todas las edades, pero más especialmente en la infancia que es cuando el organismo necesita una correcta provisión de energía y nutrientes para afrontar el día con vitalidad.

Tras un ayuno nocturno de aproximadamente 10 horas, el organismo del niño requiere una adecuada reposición de energía para garantizar un rendimiento físico y cognitivo óptimo. Diversos estudios han demostrado que los niños que desayunan de manera equilibrada presentan un mejor desempeño en actividades de atención, memoria y coordinación, además de mantener un adecuado crecimiento y desarrollo.

El desayuno de los niños de 2 y 3 años, que están en edad preescolar, debe incluir una combinación de macronutrientes esenciales: hidratos de carbono de calidad, proteínas, grasas saludables, vitaminas y minerales. La clave es la variedad y el equilibrio de los alimentos. Un desayuno adecuado debe componerse de:

  • Lácteos: Son una fuente esencial de calcio y proteínas. Se recomienda leche, yogur natural sin azúcar o queso fresco. Estos alimentos contribuyen a la formación ósea y al correcto desarrollo del sistema nervioso.
  • Cereales: Pan, avena, copos de maíz sin azúcares añadidos o galletas caseras con harinas integrales y bajas en azúcar. Estos aportan energía sostenida y favorecen una mejor digestibilidad gracias a su contenido en fibra.
  • Frutas frescas: Son imprescindibles por su contenido en vitaminas, antioxidantes y fibra. Se pueden incluir enteras, en trozos o en zumos naturales, evitando los zumos procesados que carecen de la fibra de la fruta y suelen tener un alto contenido en azúcares.
  • Proteínas saludables: Se pueden añadir huevos (cocidos, revueltos o en tortilla) o frutos secos triturados sin azúcares añadidos para reforzar la saciedad y el desarrollo muscular.
  • Grasas saludables: Presentes en el aguacate, aceite de oliva virgen extra o frutos secos molidos. Estas grasas son esenciales para el desarrollo cognitivo y la función cerebral.

Ejemplos de desayunos completos para niños

  • Vaso de leche con tostadas de pan y aguacate, acompañado de trozos de plátano.
  • Yogur natural con copos de avena y fresas troceadas.
  • Tortilla de huevo con una rebanada de pan y una mandarina.
  • Galletas caseras de avena con frutos secos molidos y un vaso de leche con cacao.

La importancia de un comedor con menú propio saludable

Si bien el desayuno es fundamental, la alimentación a lo largo del día debe continuar siendo equilibrada. Por ello, es crucial que tus hijos acudan a centros educativos que cuenten con comedores que preparen sus propios menús, garantizando la variedad y el equilibrio nutricional de los alimentos, como es el caso de Escuela Jauja.

Nuestro comedor ofrece comidas saludables, contribuyendo a la adquisición de buenos hábitos alimenticios desde la infancia, lo que favorece un crecimiento saludable y previene futuras enfermedades relacionadas con la alimentación.

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