El verano es una época tan maravillosa como desconcertante para esos padres primerizos que se enfrentan por primera vez a este periodo con su bebé, tal y como hemos podido comprobar en nuestra escuela infantil en Majadahonda.
El exceso de calor, la incidencia de sol, las pautas de hidratación… provocan muchas dudas entre los progenitores novatos. En una época de enorme disfrute, si no quieres que tu hijo/a sufra ningún percance, continúa leyendo los consejos que te damos en este post.
Protección del sol
Es evidente que la piel de los bebés es extremadamente sensible al sol de ahí que debas protegerlos con productos específicos para sus características.
El hecho de que sea más fina, sensible y con menor capacidad para generar melanina hace que la protección solar deba convertirse en una prioridad para evitar quemaduras y rojeces que repercutan en el bienestar del bebé.
Nuestra recomendación es que los niños menores de 6 meses eviten la exposición directa al sol, principalmente durante las horas centrales del día (de 12 a 16 horas).
Lo ideal si tu bebé tiene menos de esta edad es salir de paseo a primera hora de la mañana y a última de la tarde. Evita exponerlo directamente al sol, procurando que lo reciba de forma indirecta durante estos paseos que serán suficientes para que sintetice vitamina D.
Y siempre que salgas de paseo recuerda lo importante que es aplicar un protector solar específico para bebés. No les apliques la misma crema que usas tú ya que necesitan productos formulados a base de óxido de zinc y dióxido de titanio para que no se irrite su piel.
Ropa adecuada
Otro consejo que nos gustaría darte y que hemos aprendido en nuestra escuela infantil en Majadahonda es que debes priorizar las prendas de algodón y optar por aquellas que resulten más frescas y ligeras. Elige las de poco gramaje para que no le den demasiado calor ni le irriten la piel.
También es recomendable que sean de tonos claros que son más frescos y siempre acompañadas de complementos como gorras o viseras que protejan su cabeza y su rostro del sol.
Hidratación correcta
Es uno de los mayores riesgos que sufren los bebés en verano: la deshidratación. Recuerda que los niños menores de un año pueden llegar a deshidratarse en un periodo de tiempo muy corto.
Al margen de que la leche también los hidrata, ya sea materna o de fórmula, cuando el bebé ya tiene unos meses y comienza a ingerir otros alimentos, es el momento también de proporcionarle agua, especialmente si el calor aprieta. Eso sí, debe tratarse de agua natural sin ningún aditivo ni sustancia saborizante.
Precaución en el baño
Aquellos padres que pasan los días de verano en un lugar con mar o piscina, deben tener en cuenta que la adaptación al medio acuático por parte de los bebés debe ser progresiva. Si notas que lo rechaza, siente miedo o no está a gusto, no lo fuerces porque puede que esto le pase factura en el futuro.
Y recuerda que los bebés pueden ahogarse con niveles de agua muy bajos, por lo que el contacto con el agua debe hacerse siempre con extremo cuidado.
Desde Jauja deseamos un feliz verano a todos esos padres que van a disfrutarlo por primera vez con su hijo/a. Y recuerda que ya está abierto nuestro plazo de matrícula, tanto para nuestra escuela infantil en Majadahonda como en Villanueva del Pardillo.